Penthouse de Angelus Citta y Gaspard Soulacroix

Le dediqué una sonrisa a Gaspard.
-No es para tanto...ellos son los maravillosos,no yo.-reí,agradecida por desviar el tema de la conversación.-Y el pequeño Armand ya está muy grande,y guapísimo.

Llegua a casa realmente cansada, Armand y los gemelos comian pizza y Gaspard y Anika estaban charlando.. Salude con desgana y camine a la cocina, sirviendome una copa de vino blanco y apoyandome en la barra, suspirando pesadamente y recordando cada detalle del dia

-Juro que morire de una aneurisma-

Murmure con suavidad, llenando nuevamente la copa y bebiendo tragos largos, en un vano intento por relajarme

Me quedé petrificada al escuchar a Gaspard.. Estaba en camino.. Mi niño.. Solo podía pensar en Armand y en ponerlo a salvo de todo peligro.. Deje la copa en la barra con rapidez, corriendo hacia la estancia y los cajones, sacando varias armas y entregandole dos, una a Gaspard y otra a Anika

-Saquen a los niños de aqui, por favor.. Vayan a casa.. Aho estan Frnaco y Piero, nadie se atrevera a acercarse.. Por favor..-

Musite con una nota de tension en la voz, dandole un rapido beso a Armand en la mejilla, mirando a Gaspard con la precoupacion dibujada en mis ojos verdes

-Cuidense-

Murmuré quedamente, tendria que darles tiempo para salir de ahi.. Lentamente volvi a la cocina, tomando la copa de vino y llenandola, sentandome en la barra como cualquier otro día, esperando..

Quise decirle que me quedaría en su lugar, o a su lado, me daba igual, pero entendí que por mucho que me doliera mi misión era otra. Tenía que poner a salvo a Armand y Anika y los gemelos. Ella era mucho mejor que yo y era más factible que erlla se quedara. Suspiré, asentí lleno de frustración y sólo alcancé a mirar un segundo más sus ojos profunda e intensamente antes de correr a la puerta y bajar por las escaleras de emergencia a todo correr. Si conseguíamos llegar abajo y de ahí fuera del edificio estaríamos en posición de irnos.

Llegamos sin problemas y tomamos en un segundo un taxi que nos llevó a toda velocidad hasta la casa de Anika y luego a la nuestra, en donde Franco y Piero ya estaban totalmente al tanto y nos llevaron en volandas hacia dentro. Se encargaron también de enviar unos guardias a la casa de Anika ante cualquier eventualidad que ocurriera y nos encerraron bajo siete llaves en la casa.
Armand estaba ya acostumbrado a las carreras y sólo me miró triste cuando lo acosté nerviosamente en su cama.
-Mamá - me tendió los brazos frunciendo el ceño. Suspiré y lo tomé para que se quedara dormido y en cuanto lo hizo me senté a su lado a vigilarlo tal y como había hecho muchas veces, sólo estar con él impedía que saliera corriendo a buscar a su madre.

Sigue en la casa...

Senti una punzada en el pecho cuando los mire marcharse, confiaba en Gaspard, tenia que ahcerlo.. Debia llevar a Armand a casa y ponerlo a salvo... Trague saliva varias veces, llevandome la copa a los labios sin beber nada..

Los pasos fuertes y secos no se hicieron de esperar, dos hombres estaban ahí, de pie frente a mi, apuntandome con sus armas

-Angelus Citta.. Asi te queriamos encontrar, sola..-

-¿Tan seguros estan de que podran conmigo?-

Sisee, poniendome de pie con suavidad, aferrando una de las armas con la derecha y disparando con precisión, el primer hombre cayó al suelo sin oportunidad de moverse nuevamente en su vida, pero el otro ya me habia cercado y de un seco golpe, me hizo caer al suelo

-Hasta aqui llegaste Citta-

Siseo encañonandome.. Maldije por lo bajo, si que habia perdido practica!.. Me movi sutilmente, pero aquello ocasiono que el hombnre disparara, un simple rozon en el brazo que me hizo ver estrellas, la manga de la blusa se tiñó de rojo y un suave gemido ahogado surgio de mi boca

El comentario de Julia me hizo tensar.. Habia olvidado cuanto desprecio sentia por mi, claro.. ¿Quien no lo sentiría?..

-Puedo sola.. Gracias-

Sisee enfadada por aquel garrafal descuido, haciendo una mueca de dolor al apoyar el brazo en la pared para tomar el arma que se hallaba aún en la barra.. Con la misma rapidez, sali del apartamento, solo tenia en mente una cosa.. Ver que Armand y Gaspard estuviesen bien..

Llegue al estacionamiento y vi el auto de ambos hombres, con las llaves puestas en el contacto y el motor andando.. Me ubique detras del volante, pero cambiar la palanca de velocidades o incluso tomar la guia suponia un nuevo ramalazo de dolor

-Anda Julia!.. ¿Pretendes quedarte ahi de pie a ver que las flores crezcan?-

-Ah claro.. Como eres la unica que se preocupa por ellos.. Santa Julia la Grande!-

Masculle enfadada, no era exactamente con Julia con quien me hallaba enfadada, mas bien era con todo, las cosas se salian de control y una vez mas estaba poniendo en peligro a mi familia.. Sin decinr ni mu, pise el acelerador y me diriji a casa, dejando atras la estela de polvillo de la ciudad

sigue en casa xD